El Museo de Arte Contemporáneo Quinta Normal ( Av. Matucana 464) inaugura el viernes 21 de abril, a las 19 horas su primer periodo de exhibiciones del año, con cinco muestras.
Entre las exposiciones de «Paisajes: política y color», está «Paisajes Rotos» de Camila Lobos, que invita a una reflexión en torno a las fronteras y las raíces, a partir de los conceptos territorio y nación. Curada por Joselyne Contreras, curadora asociada MAC, se exploran las relaciones de poder en contextos geográficos y políticos. Raíces recolectadas, árboles secos, mapas, junto a otros objetos y audios, dan forma a esta muestra que dan luces de lo orgánicas que pueden ser las raíces en la tierra, o en un territorio.
«Restos rojos de la tarde», de Consuelo Lewin, resume una investigación de la artista sobre el paisaje desde la abstracción. Se trata de obras que evidencian sus tres décadas de trabajo continuo con pintura y color y que incluyen otros soportes y objetos que desdibujan los límites de esta disciplina. La muestra, curada por Daniela Berger, evoca el paisaje a partir de fragmentos, entre los que ocurren relaciones visuales, materiales y simbólicas.
En «Paisaje | Experiencia | Producción: Fotografía y Territorios Productivos en Chile» (2000-2020), 30 artistas se reúnen en un cuerpo razonado de fotografías que registran, aluden u operan en los paisajes productivos en Chile. Las obras son testimonios de territorios que han sido adaptados, degradados, asegurados o mitigados, a partir de los modos de extracción y producción. José Ignacio Vielma cura esta muestra que da cuenta del cambio en el paisaje durante veinte años, entre 2020 y 2022, en el marco de su investigación Fondecyt Territorios elusivos: La fotografía de autor del paisaje productivo en Chile como experiencia y documento (2000-2020), en desarrollo desde el año 2021.
Los artistas exponentes son Gaspar Abrilot, Ignacio Acosta, Pía Acuña, Javier Aravena Costa, Carlos Avello, Agencia de Borde, Colectivo Caja de Cartón, Catalina de La Cruz, Alexis Díaz Belmar, Francisco Donoso, Andrés Durán, Catalina González, Jorge Gronemeyer, Claudia, Inostroza Morales, Cristián Maturana, Sebastián Mejía, Fernando Melo, Bertrand Meunier, Rosario Montero, Sady Mora, Sachiyo Nishimura, Carolina Redondo, Celeste Rojas Mugica, Xavier Ribas, Sebastián Rivas, Nicolás Rupcich, Nicolás Sáez, Gastón Salas, Demian Schopf, Marcos Zegers
Cuatro instalaciones de gran formato que abordan el tiempo, el espacio y la tradición. «Tiempo y espacio: la certeza de la repetición», de Carolina Pino, es una instalación que ocupa una sala completa. Se trata de un reloj digital de gran formato, cuando el visitante esté en medio de la sala, la instalación mostrará la hora actual de Marte. Con la curaduría de Elías Pérez, la obra reflexiona sobre el tiempo como constructo social que ordena la vida, sin corresponder necesariamente a los relojes biológicos de especies vegetales, animales o fúngicas.

«Restos rojos de la tarde», de Consuelo Lewin
«Aleatoriedad» reúne a tres artistas nacionales que originalmente fueron seleccionadas para participar de la Bienal de Vancouver, en 2020. Con la curaduría de Sebastián Vidal, Máximo Corvalán-Pincheira extrapola la fractura de un sistema político, y de la vida, a la fisura del mismo edificio que alberga a MAC Quinta Normal. «Tejado de vidrio» replica el tragaluz que se ubica en hall de entrada del museo, pero con una trizadura, por donde filtra agua. Otros elementos, como tierra y plantas, propician una reflexión desde la propia biografía del artista, en torno a conceptos como el dolor de la pérdida y el ciclo de la vida.
Bernardo Oyarzún presenta «Anverso». Tramas en estado sólido, una video instalación inspirada en las grecas y diagramaciones iconográficas del arte textil Mapuche. En la obra, el tejido está fragmentado dinámica y estratégicamente, para generar un desplazamiento infinito. El conjunto parece una alfombra mágica que levita en un espacio y tiempo, como una condensación gráfica de ideas ancestrales.
Finalmente, en «Casa particular», Pamela Iglesias cuestiona el rol de cuidado que históricamente ha tenido la mujer en la sociedad, y cómo ese trabajo ha sido invisibilizado. Una estructura de fierro, cubierta con retazos tejidos a crochet, contiene un televisor con señal abierta, como si fuera una escena cualquiera en una casa latinoamericana. A su vez, las mantas que cubren la instalación se vinculan al entramado doméstico y hogareño, que cobija, protege y decora.
Las muestras podrán visitarse desde el viernes 21 de abril, a las 19:00 horas y desde martes a sábado desde 11:00 a 17:30 horas, con entrada liberada. (Fuente: U de Chile)
Crédito fotografía principal: Bertrand Meunier (Paisaje | Experiencia | Producción: Fotografía y Territorios Productivos en Chile (2000-2020)