Al entrar el silencio es casi absoluto. Apenas un eco lejano del caos citadino del exterior. Encabezando un largo pasillo, una video instalación – sin sonido – detiene al espectador: es el eterno correr del agua de una cascada en Oirase, norte de Japón. Es solo el inicio de un espacio de introspección, que regala el artista Gianfranco Foschino con su muestra “Más allá del Vacío”, en Galería Aninat.
“Oirase es una obra en la cual busco reconocer un tiempo antiguo que considero está tramado en el ritmo de la naturaleza. Por esto, configuro una video instalación sencilla, una pantalla LED de 65” pulgadas enmarcada y montada verticalmente a muro, que centra la atención en detalles presentes en la composición, como la cadencia de la luz de amanecer, por ejemplo”, explica el artista Gianfranco Foschino a Artpost.
Luego, un largo corredor conduce a una sala, prácticamente, vacía y semioscura. Pero dos obras “llenan” el espacio y conectan con la naturaleza. Se trata de otras dos video instalaciones.
“Reflecting Pool” (2022) es la pieza principal, la de mayor formato. El video es exhibido en el contexto de un cuarto oscuro a través de una pantalla LED modular de 3 x 2 metros colgada del cielo de la galería. Un tributo a Bill Viola, pionero del videoarte norteamericano, quien posee una obra del mismo nombre realizada a fines de los 70s.
“Se trata de piezas que observan un estanque de agua y su efecto espejado en medio de un bosque, que se conciben como un bautismo. En el caso de Viola es propio, registro de una performance donde él salta y se sumerge. En mi caso, en cambio, tiene relación con que los espectadores puedan descubrir el agua, como si fuera la primera vez. Propongo una consciencia del proceso de mirar a partir de una detención en los pliegues y repliegues de una imagen líquida, que va tornándose hipnótica” señala Foschino.
Al costado, se exhibe la pieza “Una Sola Gota”(2021), elaborada en el Bosque Pehuén que la Fundación Mar Adentro protege en Chile. La obra muestra una gota posada en una pequeña rama al costado de una cascada.
“Es un espacio húmedo y musgoso, que pareciera ser el registro de un aspecto íntimo de la naturaleza, donde considero existe una melodía silenciosa: entre la quietud y el movimiento».
“Observar el agua con sus formas cambiantes, en su fluir, deja entrever la esencia de la naturaleza. No busco determinar algo específico en el espectador, sino acercarlo hacia un universo sensible e íntimo a partir de un ejercicio de detención, contemplativo. El agua no es un recurso, sino el agente primordial de la vida en nuestro planeta, es la que equilibra todo. Darle una presencia y generar conexión con alguna de sus múltiples significaciones me parece importante en la época del Antropoceno. Para mí, representa transformación y también un medio para lograr entender cómo evolucionan las cosas en sus propios tiempos, lo que ha sido mi principal campo de estudio”, agrega.
Ni una de sus obras en la muestra está intervenida ni posee postproducción. Siempre, el silencio es protagonista.
“Creo que el silencio no tiene espacio en el mundo de híper estimulación en que vivimos. Yo lo utilizo como un recurso para sacar a los espectadores de lo habitual y provocar atención. El silencio, sin duda, estimula la imaginación ya que toda imagen remite a sonidos que existen en nuestra memoria. También me atrae porque está asociado al lenguaje original de las imágenes en movimiento”.
Y así, el efecto contemplativo que producen las obras expuestas llevan hasta lo más profundo de la introspección. Como dice el texto en la misma sala, en palabras de Rodrigo Rojas Bollo, poeta: “Foschino parte en el límite de ese vacío que antecede al cambio, porque tiene la certeza de que la observación atenta y detenida es capaz de transformar a quien la lleva a cabo”.
La muestra “Más allá del Vacío” se puede visitar hasta 17 de octubre en Aninat Galería de Arte.
CURRICULUM
Gianfranco Foschino (1983) es una figura clave en la nueva generación de artistas de Chile, reconocido principalmente por sus video-instalaciones y video-esculturas; obras en tiempo real que a modo de ventanas o umbrales provocan detención.
Foschino estudió cine en la Universidad UNIACC y Diseño en Imagen y Sonido en la FADU, Universidad de Buenos Aires (2015).

Oirase (2020) (Crédito: Luis Sergio)

Reflecting Pool (2022) (Crédito Felipe Ugalde)

Una Sola Gota (2021) (Crédito: Gianfranco Foschino)
Ha participado de diferentes exposiciones colectivas de las cuales destacan: COURAGE IN TRANSIENCE, ACAC, Aomori, Japón (2019); WARUM KUNST?, Ulm Museum, Ulm, Alemania (2017); IMPERMANENCIA, 13va Bienal de Cuenca, Cuenca, Ecuador (2016); UNSETTLED LANDSCAPES, 9na Bienal de Santa Fe, Nuevo México, EE.UU (2014); ILUSIÓN ÓPTICA, Museo de Arte Moderno, México DF, México (2014); ENTRE SIEMPRE Y JAMÁS, Pabellón Latinoamericano de la 54º Bienal de Venecia, Italia (2011); VIDEOSPHERE, Albright-Knox Gallery, Buffalo, EE.UU. (2011).
El 2014 participó como artista invitado del pabellón chileno MONOLITH CONTROVERSIES de 14º Exhibición Intencional de Arquitectura de Venecia, galardonado con el León de planta. Recientemente tuvo la exhibición personal SED curada por Dan Cameron en Centro Cultural Matucana 100 en Santiago, Chile. Vive y trabaja en Santiago, Chile.